12/08/2024
Indicadores de bienestar en peces y elementos de riesgo
Introducción
El bienestar animal se define como el estado dinámico de un individuo en relación con los mecanismos biológicos que utiliza para adaptarse de manera positiva y exitosa a los cambios en su entorno, involucrando aspectos como la salud, el confort y el estado emocional de los animales (OMSA, 2023). Los productores tienen la responsabilidad de proporcionar tranquilidad, comodidad, protección y seguridad a los animales bajo su cuidado, durante todas las etapas de la crianza, el mantenimiento, la producción, el transporte y la matanza (Arvizu y Téllez, 2016).
Al igual que en las especies terrestres, los animales acuáticos requieren un manejo y condiciones de cultivo específicas de acuerdo con la especie y la etapa de vida. Para que se considere que los individuos de una granja se encuentran en un estado de bienestar, los acuicultores deben observar, monitorear y controlar diversos elementos, como la calidad del agua, la densidad poblacional y la alimentación, entre otros.
Para conocer el estatus de bienestar en peces, se utilizan los Indicadores de Bienestar, los cuales se determinan en los animales, como el estado de las aletas o la presencia de deformaciones en alguna región del cuerpo. Una vez que los indicadores de bienestar, que surgen en los laboratorios de investigación, son empleados como estándar en las granjas, pasan a ser Indicadores Operacionales de Bienestar (Noble et al., 2018).
De acuerdo con la Real Academia Española (RAE, 2024), un indicador sirve para señalar o advertir, para mostrar 'algo' con indicios o señales. Es una característica observable y medible, debe estar enfocado, ser claro y específico, además, debe describir exactamente lo que se está midiendo y ser definido en términos precisos (ONU, 2010).
Por lo tanto, los indicadores de bienestar animal son herramientas fundamentales que sirven para medir o determinar el nivel de bienestar de un individuo, y con los cuales, se pueden registrar cambios que permitan tomar decisiones y realizar intervenciones a tiempo. La evaluación de indicadores, también favorece la identificación de elementos de riesgo que pueden afectar el bienestar de los animales. En peces, los indicadores de bienestar son específicos por especie, etapa de vida, acordes a diferentes rutinas y operaciones, así como al objetivo del sistema de producción (Figura 1).
Figura 1. Objetivos del bienestar animal en peces. IBO: indicadores de bienestar operacionales, IBLab: indicadores de bienestar de laboratorio (Creado con base a Noble et al., 2018).
Método EPI-DOM aplicado en la evaluación del bienestar de peces
El Método EPI-DOM, es un marco conceptual que facilita la ubicación e identificación de los elementos de riesgo y los diferentes tipos de indicadores que se pueden evaluar en los animales, en el modelo de los cinco dominios del bienestar animal. Es un enfoque de apoyo conceptual y metodológico para abordar la evaluación y el análisis del bienestar animal (para mayor entendimiento de las bases, se sugiere revisar Martínez-Yáñez, 2024).
Por su parte, la gestión y la administración del cultivo acuícola, es esencial para llevar a buen término el ciclo productivo. Sin embargo, es importante recalcar que es responsabilidad humana proporcionar a los animales, todos los elementos necesarios para que puedan cubrir sus necesidades (el qué) y requerimientos (el cuánto). A continuación, revisaremos algunos elementos de riesgo, que debemos prevenir, relacionados con la supervivencia: nutrición, ambiente y salud.
Elementos de riesgo para el bienestar de los peces relacionados con el manejo nutricional
✓ Restricciones para consumir alimento.
✓ Baja calidad de alimento, se deben cubrir los requerimientos nutricionales de acuerdo con la etapa de vida y la especie.
✓ Tasa de alimentación inadecuada en relación con la biomasa.
✓ No respetar frecuencias y horarios de alimentación.
Elementos de riesgo para el bienestar de los peces relacionados con el manejo ambiental
✓ Baja calidad de agua: presencia de metales pesados o patógenos, hipoxia o hiperoxia, hipotermia o hipertermia, agua ácida o alcalina, concentraciones inadecuadas de NH3+, NH4, NO2– , NO3–, CaCO3, sólidos suspendidos y disueltos.
✓ Inadecuado fotoperíodo e intensidad de luz.
✓ Presencia de depredadores (acuáticos o terrestres).
✓ Inadecuada densidad de carga (biomasa) por m3.
✓ Inadecuada relación macho:hembra.
✓ Materiales y colores inadecuados de paredes y pisos de los estanques, tamaño y forma incorrectos.
✓ Posibilidad de escape.
✓ Materiales de trabajo sucios o en mal estado (redes, contendedores, básculas, ropa y calzado del personal, etc.).
✓ Fallas en el manejo de la bioseguridad.
✓ Ruidos estresantes y/o estridentes.
✓ Monotonía medioambiental: ambiente, física, iluminación, falta de enriquecimiento.
✓ Presencia de elementos que no deberían estar en el interior de los estanques, como cubetas, redes, etc.
✓ Manejos bruscos en desdobles, cosecha, etc.
Elementos de riesgo para el bienestar de los peces relacionados con el manejo de la salud
✓ Ausencia o inadecuada vacunación (aunque se debe considerar que en varios países este manejo no se realiza, por disposiciones legales).
✓ Ausencia o inadecuada desparasitación y/o control de plagas.
✓ Nulo o inadecuado tratamiento médico, como atención a heridas o lesiones.
✓ Uso inadecuado de antibióticos y antimicrobianos.
✓ Ausencia o inadecuadas medidas de bioseguridad.
✓ Trato inadecuado en el manejo que provoque heridas o lesiones.
En cuanto a los indicadores, en el Método EPI-DOM, se clasifican en externos, internos y conductuales. En la Tabla 1, se pueden observar algunos ejemplos de indicadores de bienestar en peces.
Conclusiones
Los indicadores de bienestar animal son fundamentales para evaluar, dar seguimiento y garantizar el bienestar de los peces de cultivo. Al tener peces, los humanos adquirimos la responsabilidad ética de asegurar su bienestar. Los indicadores nos permiten cumplir con nuestra responsabilidad, midiendo y mejorando las condiciones de vida de los animales a nuestro cuidado.
Por: Dra. Rosario Martínez Yáñez
Fuente: Panorama Acuícola